Son muchas las características del concreto que interesan, sin embargo desde un punto de vista general son dos las propiedades de mayor consideración.
La primera es el asentamiento, que es una propiedad relativa a la consistencia o grado de fluidez en estado fresco, que se conoce también como trabajabilidad o manejabilidad.
El asentamiento es medido con el Cono de Abrams, según la Norma COVENIN 339, en concretos normales, la masa del cono ya desmoldada suele quedar de forma más o menos abombada y con la superficie superior casi plana. En mezclas más gruesas, al ser desmoldada quedan con la forma del cono y la base superior inclinada o totalmente caída lateralmente según su contenido de agua.
Su unidad de medida es en pulgadas siendo los asentamientos más bajos de 3″ para mezclas con mayor consistencia y los más altos de 8″ aproximadamente para mezclas más fluidas o bombeables.